jueves, 29 de noviembre de 2012

Volver a ser salvajes



El balanceo de la hamaca
quebró la rama,
nos caímos al lodo,
éramos como puercas
revolcándonos en la propia suciedad,
pero éramos niñas que teníamos
que ocultar esa liberadora parte negra,
alma cedida al diablo,
alma entre mareas de rebeldía.

La mirada de mamá
dio sentencia de muerte
a nuestra travesura,
tuvimos que disculparnos,
aunque, por dentro,
sólo queríamos volver a la tierra,
volver a ser salvajes.

Deborah Valado // Mayo 2012

No hay comentarios:

Publicar un comentario